lunes, 22 de diciembre de 2008

Surrealismo Saltillero

Ma Isabel Reyna


Hace varias semanas que estoy tratando de ubicar el libro más reciente del doctor Jorge Fuentes Aguirre pero no he tenido suerte. Estoy ansiosa de leerlo y escribirle una nota, porque antes de que acabe de circular entre sus muchos lectores, el material está ya empezando a quedarse obsoleto.
Según entiendo el libro recopila los hechos inauditos que ocurren en tierras saltillenses que en otro rincón del planeta serian inimaginables. Un ejemplo es la muerte de uno de los voladores de Papantla que se presentaban en la feria. Otro, pero de este no estoy muy segura, fue la muerte de un hombre en su recámara causada por un elefante… ese tipo de cosas son las que hacen a Saltillo un lugar único e insólito en el planeta tierra.
Los ejemplos podrían llenar páginas enteras: un obispo católico bendiciendo la imagen de un Buda, obras hidráulicas hechas con la bendición de las autoridades estatales y violando flagrantemente las disposiciones de la CNA y lo que es peor, las de la Madre Naturaleza que no deja una sin cobrar; avenidas donde se construyen dos puentes y antes de inaugurarlos ya están empezando la construcción de otro, justo en medio de los anteriores como para que la circulación en la avenida nunca sea del todo fluida, en fin, la lista puede ser larga y sinuosa como el trazo mismo del bulevar Colosio, en sí mismo, otro ejemplo más del surrealismo saltillero.
Pero lo que si me tiene con la boca abierta son los sucesos de las semanas pasadas De una manera inexplicable, fue secuestrado en Saltillo Félix Batista, una de las piezas clave del FBI. Experto en estrategias de seguridad, ex mayor del ejército de Estados Unidos y seguridad, responsable para América Latina de la Consultora ASI Global de Estados Unidos, vino a la ciudad para tener una serie de encuentros con empresarios locales y el Secretario de Seguridad Pública de Coahuila, para compartir estrategias de defensa ante el crimen organizado.
No creo que existan en el mundo muchas personas mejor preparadas que él, sin embargo, fue en la otrora llamada “mejor capital de México, donde vino a ser víctima de aquello que combate. Pilar Valdés jefe de seguridad del GIS durante años, hoy colega además de amigo personal de Batista, fue usado de “carnada” para atrapar al experto estadunidense de quien hasta el momento de escribir estas líneas no se ha tenido noticia. Una anécdota, que esperamos tenga un final si no feliz, por no menos no trágico, que el doctor Jorge Fuentes tendrá que incluir en la primera reedicion del libro que sigo buscando por todos lados.

Un abrazo a todos mis lectores y mi agradecimiento personal por todas las muestras de cariño recibidas en estos últimos días

Feliz navidad para todos