miércoles, 31 de diciembre de 2008

NUESTROS MEJORES DESEOS PARA EL 2009

Queridos Amigos:

Al tiempo que agradecemos su compañía, les deseamos que el año 2009 esté lleno de bendiciones y que sus metas y sueños se hagan realidad.
Sabemos que nos el horizonte se presenta difícil, sin embargo, creemos que en los retos están las oportunidades de innovar y mejorar.
FELICIDADES!!!

LLOVIENDO SOBRE MOJADO

Mario Dávila Flores

Como si fuera poco el desplome de la industria automotriz tanto en los mercados de exportación como en el interno, lo que se ha traducido en la Región Sureste de Coahuila, en el cierre de algunas plantas proveedoras, así como en paros técnicos en las grandes ensambladoras como General Motors y Chrysler, situación que ha encendido los focos rojos de la economía local. Empero, la situación se ha vuelto mucho más complicada debido a los acuerdos firmados en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), en el capítulo automotriz, que entrarán en vigor mañana primero de enero del 2009.

El asunto preocupante es la entrada legal al País de vehículos usados procedentes de los Estados Unidos; se trata de unidades de diez o más años de antigüedad que podrán ingresar sn ningún problema al territorio nacional, y seguramente algunos de estos automóviles habrán de cruzar los puentes fronterizos de Ciudad Acuña y Piedras Negras, lo que hará más intensa la concentración de unidades de transporte en nuestra entidad, y en medio de esta crisis, dicho en otras palabras: nos está lloviendo sobre mojado.

¿Qué importancia tiene la entrada de estos coches a México? Para dar respuesta a esta pregunta, debemos primero ubicar el contexto del que hablamos, y para ello es conveniente señalar, que con datos del 2007, nuestro País se colocó como el décimo productor mundial, con una cifra superior a las dos millones de unidades; no hay que olvidar que estamos hablando de producción, de la cual se exporta el 80 por ciento del total; es decir, de cada cinco vehículos producidos, cuatro se exportan.

Además esta rama industrial, es fuente del 22 por ciento de las exportaciones, del 20 por ciento de la producción manufacturera, genera más de un millón de empleos en toda la cadena automotriz, la que incluye ocho grandes ensambladoras, y más de mil empresas de autopartes. Toda esta estructura está siendo sacudida por la crisis global, y ahora la intensidad de las ondas telúricas se reforzará con la entrada legalizada de los autos usados, en un compromiso pactado hace ya 16 años, y cuyo plazo finalmente se ha cumplido.

De acuerdo a información proporcionada por organizaciones de comerciantes de automóviles, en el periodo comprendido del año 2005 al presente, fueron internadas al territorio nacional un total de 2,5 millones de unidades usadas procedentes de los Estados Unidos; son los llamados autos chocolate. Para ese mismo lapso de tiempo, por otra parte, se vendieron en nuestro mercado 2.2 millones de autos nacionales; es decir, que las ventas de los autos usados del extranjero superaron en un 14 por ciento a las internas, que supuestamente tienen sus papeles en orden.

Sin embargo, información actualizada disponible, nos muestra que las importaciones de autos usados, muchos de ellos verdadera chatarra, procedente del norte de nuestras fronteras, han cobrado intensidad, pues en los primeros diez meses del 2008, ascendieron a la cifra de 740 mil unidades, estimando los expertos en la materia, que a partir de esta apertura, las ventas de autos nacionales pudieran desplomarse hasta en un 40 por ciento, lo que colocaría tanto a productores, como distribuidores y comerciantes de lotes usados, en una posición sumamente adversa.

Los posibles efectos de los acuerdos pactados hace 16 años, además de un mayor desempleo, serían un aumento en la inseguridad, derivado del menor control sobre los autos importados, daños más severos al medio ambiente por emisiones, afectación de la infraestructura carretera así como saturación en el tráfico urbano. Resultaría irónico, que los nuevos puentes y las vialidades que se han construido en Coahuila, vengan a servir para el mejor desplazamiento de los autos usados que nos venden los americanos; nadie sabe para quien trabaja.

Ante esta situación, México tiene pocas cartas en la baraja, siendo una de ellas, el reforzar la vigilancia para cumplir con la normatividad existente, vigilando el comportamiento del personal de las aduanas, pudiendo recurrir al recurso de las salvaguardas, de comprobarse que esta apertura, representa una grave amenaza para la industria automotriz nacional, que en caso de proceder, tendría que ser compensada mediante concesiones equivalentes en otro sector de la economía; lo dicho nada es gratis en el mundo del comercio. Pese a lo anterior, les deseo lo mejor a todos para el 2009.

Redondeo.
Cuando estaba cerca de superar la marca de cuadrangulares, Hank Aaron, para pasar desapercibido, firmaba en los hoteles bajo el nombre de George Ruth.