sábado, 22 de agosto de 2009

Novatadas en el Ateneo



María Angélica Aguirre Carreón

Hace unas semanas, la algarabía total, los buenos augurios y deseos, por un futuro profesional próspero y exitoso. Se graduaban mis alumnos y alumnas de la secundaria.
Hoy, la desesperación y el desconcierto… ¿cómo orientar a mi hija que está siendo víctima de las novatadas? Me llamaba una de las madres de familia, desesperada ante la impotencia de ver cómo, queriendo brindarle una oportunidad de estudio preparatorio para la formación profesional, la había llevado indefensa a las garras de la delincuencia impune.
Escudados en la “autonomía universitaria”, dentro del campus, estudiantes mayores mantienen aterrorizados a los de nuevo ingreso y abusan de ellos, quitándoles sus pertenencias y dinero, pero sobre todo, la parte más importante de sí mismos, su autoestima y su dignidad.
Los chicos, y paradójicamente, más las niñas, ejercen prácticas salvajes y arbitrarias, en que atropellan a sus pares de manera inmisericorde, en la tierra de nadie.
Se les despoja de todo lo posible y además de amedrenta con violencia emocional, cortándoles el cabello y amenazándolos con objetos punzo cortantes.
La autoridad, brilla por su ausencia ¿tienen miedo de perder su popularidad y en las próximas elecciones, no seguir siendo directivos o maestros?
Las instituciones donde se practican esas costumbres de dominación y atropello ¿pueden seguir llamándose educativas?
La aspiración de toda universidad, es abrir la mente y el corazón de sus estudiantes, para volverlos hombres y mujeres de bien; en aras del conocimiento, el ser humano se desarrolla plenamente y se hace verdad el sueño de la evolución humana. Por supuesto dije evolución y no involución, porque con esto que está pasando, pareciera que en lugar de hacia delante, vamos hacia atrás.
Ojala podamos ganarnos de nuevo la fama de “Atenas de México”
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Los invito a visitar mi blog... http://mangelicaguirre.blogspot.com/

LA GRAN COMILONA

Mario Dávila Flores
La fiesta fue en grande, pues gracias a los altos precios del petróleo- y no a la producción, ya que esta ha venido desplomándose estrepitosamente- en los últimos años las participaciones federales registraron incrementos inéditos, lo que significó una carretada de dinero para los gobernadores de todo el país, así como para los presidentes municipales..

En efecto, si en el año 2000 las participaciones federales cerraron en 178 mil millones de pesos, para el 2005 su monto ascendió a 279 mil millones de pesos, alcanzando su apoteosis en el 2008, año de la gran comilona, con 423 mil millones. Sin embargo, el rebote espectacular sucedió entre ese último año y el 2007, cuando la bolsa de las participaciones federales se incrementó en 90 mil millones, debido a que el precio del barril de la mezcla mexicana de exportación rebasó por mucho los 100 dólares, generando un enorme excedente que se desparramó por todo el país.

Mientras la bonanza estaba en todo su esplendor, los señores gobernadores que tuvieron más dinero del que nunca imaginaron, el que por cierto, les llegó por la vía fácil, intensificaban sus críticas al Gobierno Federal y al nefasto centralismo, según ellos la raíz de todos nuestros males. Esta estrategia consistió en crear una cortina de humo para distraer la atención sobre las carretadas de dinero que se volcaba sobre las entidades federativas.


Ahora que se redujo el maná celestial, los señores gobernadores continúan criticando a las autoridades financieras de la federación, a pesar que en 2009, se habrán de repartir 40 mil millones de pesos más que en el año 2007. Para relacionar lo anterior, el porcentaje de las participaciones federales respecto al PIB nacional, pasó del 2.98 en 2007 al 3.51 por ciento en 2008, lo cual es muy significativo.

Ahora que vienen los tiempos de apremio, debido a la caída en la recaudación fiscal y a que los precios del petróleo no han llegado a los niveles del año pasado, se escucha el llanto y el crujir de dientes, y sobran culpables; desde el Presidente de la República para abajo, pero siempre en el ámbito federal; y siguiendo la voz del amo, todo mundo le tira al negro, en lo que se ha convertido el deporte de moda entre los corifeos que abundan por cierto.

El problema se ha complicado, gracias a que los gobernadores pensaron que la bonanza no tendría fin, y transformaron esos ingresos temporales en permanentes, lo que significa una grave irresponsabilidad. Lo anterior fue señalado por José Antonio González Anaya, titular de la Unidad de Coordinación con Entidades Federativas de la Secretaría de Hacienda.

El problema se debe a que nuestros políticos no supieron administrar la abundancia de que gozaron en plena crisis, pues como señaló Juan F. Pardinas, directivo del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) “…el gasto en burocracia en los gobiernos municipales aumentó 68 por ciento durante el periodo 2001-2007.” Pardinas se quedó corto, frente al incremento que registró la nómina en varios estados, como el de Coahuila, que según datos de INEGI, amplió la cantidad de burócratas en un 70 por ciento en los últimos cuatro años.
No se requiere ser un experto financiero, para advertir que la pésima administración y el derroche acompañaron a esta derrama inusitada en el país, y para muestra, y sin ir tan lejos, tenemos el caso de Parras para documentar nuestro optimismo, al salir a flote la corrupción y el increíble abuso de autoridad que se dio en dicho municipio, llegando al absurdo que el DIF otorgó licencias para ampliar el horario en la venta de bebidas alcohólicas, se supone, a cambio de algo. Como recompensa, el alcalde ese tiempo en funciones, fue premiado con una diputación local.

Sin embargo los indicios de que algo está podrido en Dinamarca cada vez son mayores, como lo muestra el hecho de que bien entrado el 2009, el Congreso Local no ha sido capaz de dictaminar las cuentas públicas del año 2007 de un buen número de municipios coahuilenses. Así las cosas van a faltar auditores para poner en claro el desorden imperante, y para colmo, un buen número de municipios habrá de endeudarse, como premio a su ineficiencia.

Todo este caos administrativo y financiero, se agudizó y se propició por el fenómeno de los chapulines; alcaldes que dejaron sus responsabilidades, sin que hubiese un mecanismo ordenado de rendición de cuentas; todo se hizo al garete, con la posibilidad de que podamos estar viendo la punta del iceberg, y que como sabemos, uno de ellos causó el hundimiento del poderoso “Titanic.”


Redondeo. Tal vez la gran final “Saraperos” “Tigres” habrá de ser el magno escenario que marcará la despedida del gran Matías Carrillo como jugador activo, después de cuatro décadas en los diamantes.